Eliminamos de nuestra ruta brasileña varios destinos que nos hubiese gustado un montón conocer...
Luego de la fiesta carioca vino la calma bahiana... Nos quedamos 3 días en la isla de ITAPARICA (enfrente de Salvador de Bahía), tirados en la playa... Viviendo en el agua (la mejor que probamos nunca)... por el color de nuestra piel, deducimos que éramos los únicos turistas de la isla... Era el paraíso!!!!
Cruzamos en ferry hasta SALVADOR DE BAHÍA. Nos alojamos 2 días en Pelourinho, la zona alta de la ciudad, la más típica y tradicional... Para nosotros, lo más bonito de lo que vimos, que no fué mucho... El último día nos alojamos en casa de Andrea (una couchsurfing que vivía en la zona "moderna"). Desde allí fuimos a pasear por las playas de Salvador, a pegarnos un chapuzón... Probamos por fín el agua de coco y nos cansamos de andar y andar bajo un sol fulminante.
cocoman en acción y posando para la ocasión
capoeira fulera
en Pelourinho
Próxima estación...: JERICOACOARA... En la zona noreste de Brasil, un mundo aparte, un pueblo pequeño, hippie, con calles de arena y con unas preciosas dunas en la playa; donde el tiempo se para... Todo tranquilidad, naturaleza, relax...Llegamos allí luego de muchas horas de autobús desde Salvador... Nos quedamos tambien sólo un par de días. Las prisas son malas para estos sitios, pero nos quedaban unos 10 días de visado y todavía faltaba el Amazonas.
Pedra Furada
Salimos en un 4x4 de Jericoacoara dirección Camocín; de allí unas 3 horas en bus a Sobral y de aquí unas 23 horas a Belém (donde tomaríamos un barco que, durante 5 días, recorre el AMAZONAS hasta la ciudad de Manaus).
Barco Santarém
En el barco pasamos unas 7 noches, ya que pudimos ir a colgar la hamaca un día antes de partir (así nos ahorramos la pasta del hostal) y también la noche de llegada a Manaus (al llegar de madrugada a la ciudad también nos permitieron pasar esa noche en el barco).
La vida en el barco a veces se nos hacía algo monótona. Lo mejor: fotografiar los amaneceres y atardeceres, las charlas con la gente del barco... Estábamos todos muy juntitos con nuestras hamacas colgadas unas al lado de las otras.
Había algunos mochileros como nosotros, pero la mayoría eran gente local que por un motivo u otro tenía que hacer ese trayecto.
El viaje de 5 días en hamaca con "café da mañán" (como ellos le llaman al desayuno) nos salió por 180 reales por persona (luego descubrías que habían estafado a mucha gente...precios de todo tipo...Hay que regatear). A la hora de comer nos las arreglábamos muy bien ya que eran 5 reales por persona buffet libre y nosotros llenábamos un plato a tope para los dos... Somos rapiñas... y qué???
En las duchas, compartidas, muy pero que muy compartidas (unas 6 para 130 personas) siempre había una cucaracha muy tranqui esperándome...
Un día se fundieron los motores del barco y nos tuvo que remolcar un carguero. Estuvimos encallados en la orilla un par de horas y un borrachuzas todo loco, se tiró al agua (había pirañas) y al poco rato vemos que al lado, en un árbol, se movía con mucha chispa una gran "culebrita"... Arrrgggg!!!!
Un día se fundieron los motores del barco y nos tuvo que remolcar un carguero. Estuvimos encallados en la orilla un par de horas y un borrachuzas todo loco, se tiró al agua (había pirañas) y al poco rato vemos que al lado, en un árbol, se movía con mucha chispa una gran "culebrita"... Arrrgggg!!!!
encallamiento y visita de la "cobra"
uno de los poblados del Amazonas
casitas en medio de la selva (algunas con parabólica)
Todo quedó en un pequeño susto que rompió nuestra monotonía.
Llegamos a Manaus, también remolcados porque volvieron a fallar los motores, el domingo de madrugada. Pasamos la noche en el barco y al día siguiente fuimos a la terminal de buses para ya salir del país, dirección Venezuela. En el largo viaje en bus, descubrimos un poquito de la región brasileña de Roraima, con paisajes realmente impresionantes... Una belleza natural.
saliendo de Brasil
Entramos a VENEZUELA por Santa Elena de Uairén. No vamos a contar nada de este país, porque todo fue bastante negativo y tampoco queremos que nadie se sienta ofendido (y menos Carlos Baute)... Seguro que hay cosas maravillosas que ver y gente estupenda, pero nosotros no dimos con ellas (la pena fue no tener tiempo para ir a los Tepuis y al Salto Ángel en la Gran Sabana).
Cuelgo algunas fotos...
favela
Carayaca
Puerto la Cruz
Salimos del aeropuerto de Caracas hacia New York, todos ilusionados, con muchísimas ganas de conocer la gran manzana...
Como siempre, un gran abrazo para todos, aunque muchos ya sabeis que hemos vuelto a casa. Es esa la razón de que en nuestro blog el carnaval de Río durase casi hasta mayo.
Todavía tenemos una entrada que colgar para que quede realmente actualizado.
Ya tenemos fecha de partida para nuestro paseillo por el continente asiático. Prontito, prontito...
Glo.
